miércoles, 29 de abril de 2020

El espejo de un gran lector.




El espejo de un gran lector

Por mucho tiempo se ha depositado en la escuela la función de la enseñanza de la lectura, era allí donde mamá y papá, convencidos de la efectividad de la labor docente, otorgaban la confianza de los aprendizajes, en algunos casos, esto se debía a que tanto papá como mamá no sabían leer, en otros, porque simplemente estaba establecido socialmente así, y ¡vaya que si era efectiva la enseñanza que en la escuela se proporcionaba! Los tiempos fueron cambiando, la sociedad fue adaptándose a lo nuevo y con ello los índices de analfabetismo fueron descendiendo en gran medida, la tecnología fue acaparando cada vez más espacios y aunque todo tiende a mejorar, es la escuela quien empezó a hacerse escuchar con un grito de pedido de ayuda a las familias. La escuela continúa en su labor de siempre, enfrentando los nuevos desafíos que la sociedad actual le impone y es por ello que reconoce una disociación entre la práctica de la lectura y el éxito escolar. La ciencia se ha ocupado de indagar sobre cómo y en qué momento se desarrolla el hábito de la lectura y es por esto que la escuela cada vez más, demanda la presencia de la familia en el afianzamiento de ella.
Las estadísticas hablan de la disminución del analfabetismo tal cual lo conocemos, pero aparecieron en escena conceptos tales como analfabetismo digital, analfabetismo funcional, analfabetismo emocional, pero lo que aquí nos reúne apunta principalmente a que este pedido, que aparece explícito desde la institución escolar, tiene que ver no sólo con el aprendizaje de la lectura o con el hábito de la lectura sino también con la comprensión de aquello que se lee.
Este pedido bien aceptado por muchas familias, desemboca en la búsqueda desesperada de recetas o estrategia mágica para ayudar a los niños/as y adolescentes de la casa y por esto,Aprendiendo con mamás en colores quiere aportar una postura sobre esta tan importante temática.
En primer lugar, es preciso reconocer que cuando hablamos de problemas en la lectura, nos adentramos en un terreno complejo y bastante amplio por lo que desde el principio te decimos No hay receta mágica que logre que tus peques lo adquieran de un día para el otro.
En segundo lugar, en este artículo solo haremos una introducción con lo que consideramos es el ingrediente más importante en este proceso, exponiendo los fundamentos científicos que avalan esta postura, mientras que el abordaje más profundo se irá realizando progresivamente en otros post. Y aquí si te podemos decir, que si haces lugar a este ingrediente principal te aseguramos que poco a poco y con la ayuda de todo lo que compete a la enseñanza de los mismos, lograrás afianzar los cimientos fundamentales para que tu peque desarrolle el aprendizaje de la lectura, el hábito lector y, sobre todo, llegue a ser un lector comprensivo, forjando las bases de un adulto comprometido y crítico.
Partiremos desmitificando algunos mitos, por ejemplo el que afirma que “aprender a leer se aprende leyendo”.
Te decimos que no, porque para quien no sabe descifrar un código es imposible hacerlo. ¿A qué apuntamos con esto? Simplemente y muy por encima te decimos, que a leer se enseña, lo enseña el profesor en primaria, pero también lo enseñan los adultos, en general, por el simple hecho de leer, leerles y que los peques vean la acción de leer. Una vez que se aprende a descifrar el código se va perfeccionando la habilidad, pero aún así precisa de nuestra mano, de nuestra voz, para alcanzar la cima a la que damos a llamar "el gran lector".
Otro mito es “creer que porque han aprendido a leer devendrá el hábito y la comprensión”. Te decimos que no, porque el hecho de descifrar el código, es decir reconocer las letras del alfabeto y las palabras que conforma la unión de las letras, no deviene ni el hábito ni la comprensión, pues el hábito se adquiere a partir de la práctica y del gusto en este caso de la lectura, de lo que se lee, mientras que a comprender se enseña. Lo enseña el profesor/a, a lo largo de todo el tránsito por la educación formal y lo enseñamos los adultos dentro y fuera del colegio, reforzando la lectura y las distintas situaciones diarias con las preguntas propias que hacen que la voz de nuestros hijos, sobrinos, estudiantes se haga presente desde lo que piensan opinan o creen. Al igual que el hábito, la comprensión precisa de práctica, pero además necesita de la guía.
Otro mito es pensar que “el proceso de aprendizaje de la lectura inicia con el ingreso al sistema escolarTe decimos que no, que el aprendizaje de la lectura empieza desde los primeros días de vida y hasta nos atrevemos a asegurar que inicia desde la gestación. Distintos estudios científicos han comprobado que aquellos niños que recibieron la lectura de diferentes textos desde que se encuentran en el seno materno, tienden a tener mejor aprendizaje, pero principalmente empiezan a recibir un hábito de un narrador, un papá o una mamá que lee, cuando nacen, si continúan recibiendo la voz lectora permite que cuando llegan al colegio, lo que muestra el profesor/a intentando enseñar desde la sistematización, se vuelve conocido ameno y no ajeno.
Y te decimos un secreto… además de estar enseñando a leer estas enseñando el hábito de la escucha. Que también se enseña y que también nuestros peques precisan aprender.
Estos mitos que intentamos desmitificar nos ubican en una posición incómoda, es decir nos ubica en una posición de protagonista y no de espectador en lo que el aprendizaje de la lectura respecta. La búsqueda de niños y adolescentes lectores, de lectores habituales, lectores comprensivos y por ende adultos críticos deviene, a que el reflejo que devuelven, es justamente lo que nosotros los adultos estamos mostrando, es decir, si tenemos generaciones poco lectoras, poco comprensivas, es justamente porque el modelo que estamos mostrando es de adultos no lectores, de adultos no comprensivos y adultos no críticos. Aquí cuando hablamos de adultos, no hablamos sólo de mamá y papá, sino, que hacemos referencia a todos los adultos y aquí la necesidad de hacer caso al reflejo que están proyectando también los educadores y la sociedad en su conjunto.
Las nuevas generaciones precisan ser el espejo de adultos promotores de lectura, en los primeros años empecinados en que aprendan a leer, les proveemos de libros y enseñanzas de textos de acuerdo a su edad y esto está muy bien, pero ¿cuántos libros para nuestra edad, nos ven leer? Muchas veces lo que pedimos que hagan está muy lejos de lo que mostramos, es decir hay una disonancia en la reproducción. Si esta falta de reflejo se mantiene a medida que el niño/a crece y no existe un espejo donde pueda observar que aquello que hace se reproduce, todo el esfuerzo que pudo haber hecho la escuela o los padres en acopiar libros y en insistir en la lectura conformando hermosas y abultadas bibliotecas que al final terminan siendo un objeto más de la decoración del hogar, terminan cayendo en sacos rotos.
A esto, es preciso agregar que la presencia de las nuevas tecnologías van irrumpiendo en el mundo de nuestro hijos cada vez a más corta edad, lo cual no está mal por el simple hecho de que constituyen una nueva forma de alfabetización, la que conocemos como alfabetización digital y mucho se ha buscado endemoniar el uso de ellas, pero es una realidad aceptar que es un cambio al que se enfrenta nuestra sociedad y por ende, por una cuestión de salud psíquica, el hecho de incorporarla y aprenderlas por lo que resulta imprescindible adaptarse a ellas, siempre y cuando se haga en la medida justa con las precauciones específicas que cada edad demande. Sin seguir desviándonos del tema que aquí nos compete es preciso hacer alusión al uso de estas nuevas tecnologías por parte de los adolescentes. Estos, tienen el acceso directo a ellas y por ellas, a las redes sociales donde sin duda leen y sí que lee, en otros formatos, pero ejerciendo el poder que les otorga la lectura. Aquí se pone en escena otro de los reflejos que proyectamos como adultos, es probables que lo que mostramos, es un adulto que ha incorporado como un órgano más de nuestro cuerpo al teléfono móvil, a la tableta o al ordenador y es eso lo que nuestros adolescentes reflejan. Entonces entra en juego la necesidad de que los adolescentes posean y sepan usar la herramienta de la comprensión y la crítica, para elegir lo que leen, para no dejarse influenciar y por ende para no entregar su ser a la comunidad internauta, olvidando las bases de valores que la familia, la escuela y la sociedad en la que vive le demandan (pero que directamente no están inculcando). Y aquí volvemos a preguntar ¿Qué espejo estamos poniendo delante de nuestros hijos? Este es el ejemplo más claro de que los adolescentes han adquirido el poder de la lectura, pero no en su totalidad, porque probablemente, al momento de elegir lo que leen no sea justamente aquello que refuerza lo que se buscaba inculcar en los primeros años de alfabetización. Aquí la crítica y la comprensión juegan un papel fundamental y si no hemos enseñado a usar estas herramientas, o lo que es peor, no los hemos provistos de ellas, nuestros adolescentes entran a formar parte de este índice al que llaman analfabetos funcionales, que en la actualidad une a sus listas un par de generaciones y con esto nos referimos a adultos que leen, pero ejercen muy poco de la complejidad que el leer concierne.
Pensarnos como adultos conscientes y responsables de la crianza de nuestros hijos, nos interpela a cuestionarnos sobre nuestro rol de espejos, nos olvidamos que ellos son nuestro vivo reflejo y los criticamos y otorgamos responsabilidades a la familia y a la escuela como un bucle constante sin darnos cuenta que todos formamos parte de una sociedad. Nos olvidamos que nuestros hijos forman parte de un hogar más amplio, el barrio, el pueblo, el país, los medios de comunicación, las instituciones en su conjunto, nos olvidamos que son y somos parte de un sistema más grande donde de una u otra manera todos somos mamá, todos somos papá que entre todos conformamos un espejo más grande al que llamamos sociedad.
Entonces, en lo que Aprendiendo con mamás en colores intenta dejar huella, es justamente en la sociedad que dejamos a nuestros hijos, en la sociedad donde transitan nuestros hijos y si bien para muchos puede sonar utópico, como Mamás en colores, resulta la existencia de una posibilidad siempre y cuando, como adultos nos comprometamos en ello. Si queremos niños lectores, adolescentes lectores, el ingrediente principal es que nosotros los adultos nos convirtamos en esos grandes espejos que reflejen lo que queremos. Y Tú ¿te unes a nuestro compromiso?
Si tu respuesta es sí, te proponemos algunos otros ingredientes para dejar huellas en nuestros hijos y ellos empiecen a reflejar al gran lector que queremos que sean.
👣En los primeros años ellos aprenden a leer a través de ti, por ende, cuanto más les leas ellos también estarán leyendo, es probable que no se queden quietos, que vayan de un lado para el otro, pero no es porque no les guste o porque no quieran escuchar, es simplemente porque están creciendo y parte de su crecimiento es el estar en constante movimiento. Entonces empieza por leer rimas, por cantarle y mucho y de todo, equivócate en la letra de lo que leas o de lo que cantes y deja la huella de en la pregunta - ¿Era así lo que decía la canción? Noooo ¿verdad?, ¿recuerdas como decía la canción? Haz del momento de lectura, un momento divertido, mágico, especial (una vez a la semana, una vez al día, una vez al mes, pero un momento especial un tiempo dedicado a ello). Deja que manipule los libros, que los rompa o que los coma si le apetece, una vez que los reconozca como parte de él/ella, como parte de la casa y de sus actividades los irá cuidando.
👣A medida que crece ofrécele distintos tipos de lecturas donde tú seas el/la protagonista, donde ella o él sea el protagonista o los villanos, pregúntales personaje le gusta más, porque los elije y tú elige y tú fundamenta. Mientras haces otras actividades coméntale que vas a empezar a leer un libro, una revista una receta, que te vea leer una nota, una guía, un cartel.
👣Al entrar a la adolescencia y durante su tránsito, coméntale una noticia, proponle leer algo juntos, pero desde la individualidad (quizá la lectura que proponga no sea de tu agrado pero demuéstrale que también se lee aquello que no nos gusta, porque solo conociendo podemos afianzar mas nuestras elecciones), expone tu opinión sobre algún acontecimiento, regálale textos que estén acordes a sus gustos y proponle lo desconocido, hazlo interesante, ponte en el lugar de un pensador diferente al que el elige.
👣Si tu hijo no lee, pues lee tú, que te vea leer y no le digas lee, lee, simplemente conviértete en ese espejo que refleje a un gran lector.

De una forma sintética Aprendiendo con mamás en colores ha querido acercar a las familias y los profesionales de la educación la importancia de nuestra figura como adultos, a partir de estas básicas nociones queremos que reconozcan el valor de cada una de nuestras acciones en nuestros niños/as y adolescente. Queremos que desde casa se re signifique la recepción, el cómo nos ven y cómo actúan muchas veces esta íntimamente relacionado.
Entonces, si reconocemos esa herramienta que poseemos para conformar bases sólidas en el crecimiento y desarrollo de nuestros hijos e hijas, ¿Porqué no utilizarla?

Ivana y Julieta desde 

Aprendiendo con mamás en colores




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domingo, 26 de abril de 2020

Acoso escolar





Hoy, desde Aprendiendo con mamás en colores vamos a hablarte del acoso escolar, también llamado bullying, delimitaremos el término dentro del contexto escolar pero también desarrollaremos el acoso escolar extramuros , es decir, aquella situación de hostigamiento que inicia en la escuela y continúa fuera de la misma, mediante lo que se denomina cyberbullying. Posteriormente para profundizar en la comprensión, a partir de los aportes de las Neurociencias aplicadas al aprendizaje, proponiendo un marco de intervención.

Definimos al acoso escolar como "toda situación de hostigamiento que se da dentro de un contexto escolar, en la que se presentan situaciones de maltrato sea física, verbal o psicológico, de una manera continuada en el tiempo, entre un acosado y un acosador, cita situación se da en una relación asimétrica de poder, donde el acosado presenta una suerte de características lábiles y el acosador tendría una "superioridad" reconocida, "fomentada", "otorgada" por el entorno, es decir, el grupo de pares, esa "superioridad" que es reconocida por un entorno, le da al acosador la sensación de habilitarlo para ejercer su violencia.
De esta manera, para exista bullyng no deben faltar las siguientes características:

Contexto escuela.
Relación asimétrica.
Continuidad en el tiempo, es decir, se repite.

Así, al hablar de acoso escolar, se habla de violencia y no de agresión , ni de agresividad, porque cada uno de estos términos son conceptualmente diferentes, y es esa conceptualización la que le confiere al acoso escolar la situación de violencia. Para entenderlo mejor, haremos la distinción de los términos:

Agresividad: Está ligada al temperamento de una persona, es impulsivo.
Agresión: Es una acción sobre un otro una la víctima.Podemos decir que la agresión es el pasaje de la agresividad a la acción, es fortuita e instantánea y se da en una situación y allí acaba.
Violencia: es una acción intencionada, deliberada, que tiene como fin la sumisión del otro.

Actores que aparecen al momento de existir acoso escolar

Cuando se habla de acoso escolar, hablamos de uno o varios acosador/es, los cuales actúan con intencionalidad, ejerciendo violencia sobre un otro,la víctima, cada uno de éstos, presentan las siguientes características:

Quien acosa tiene una tendencia a abusar de su fuerza, presenta características emocionales tales como: falto de empatía, impulsividad, baja tolerancia a la frustración, ausencia de autocrítica, así como también ausencia de sentimiento de culpabilidad, además se observa una tendencia a la no aceptación de la norma.

Quien es la víctima, presenta características de ser distantes, impopulares y, la intimidación que sufre le producen ansiedad, inseguridad y baja autoestima, habiendo incluso quienes llegan a sentirse merecedores de esa violencia. (Si quieres saber más sobre autoestima clica aquí)

Hasta aquí venimos hablando de un contexto " la escuela" , una categorización de la acción perpetuada en el tiempo" violencia" (con sus característica principal de ser intencionada) entre la relación asimétrica de un acosado y un acosador pero esto no acaba allí, ya que existen dentro de esa situación otros participantes, los cuales tanto pueden hacer por perpetuar el acoso como eliminarlo, estos son los espectadores.

Los espectadores son aquello que presencian la situación y tal como citamos anteriormente los dividimos en dos grupos:

Grupo 1: Espectadores que forman parte del acoso
Son aquellos que desempeñan un papel activo en la situación de violencia, pero no son los que lo iniciaron, sino que participan con algún golpe , insulto colaborando a la causa.
Otros que aprueban el acoso pero no ejercen ninguna acción.
Grupo 2: Espectadores que no forman parte del acosos escolar y tienen un rol pasivo.

Estos suelen mantener cierta distancia de la situación porque no es asunto suyo, "miran hacia otro lado" o bien, estando en desacuerdo con la misma, no hacen nada por miedo a represalias. Estos últimos, los llamados espectadores pasivos, son los que tienen, en conjunto, la herramienta para frenar la situación.
Este ultimo grupo mencionado, son con los que , desde la institución educativa, los adultos deben trabajar para actuar ayudando al acosado, de hecho programas de actuación como por ejemplo kiva (Método finlandés para la intervención en el acoso escolar) apelan a apoyarse en ellos para resolver una situación de acoso escolar.

Hasta ahora mencionamos a todos los personajes implicados que, de alguna manera, están presentes en el acoso escolar, participando ya sea de forma activa o pasiva, ahora vamos a profundizar en el contexto.

Cuando hablamos de bullying hacemos referencia a esa situación asimétrica de violencia que se da en la escuela, pero en la actualidad se plantean nuevos escenarios, en los cuales se perpetúa la violencia que nace allí, en el contexto escolar, pero que continúa fuera de la escuela, mediante plataformas digitales, a este tipo de violencia la denominamos cyberbullying. El cyberbullying es extremadamente peligroso porque potencia la violencia debido a la característica que presenta - Acceso continuo a la víctima y audiencia ampliada. Cuando la situación de acoso escolar se perpetúa extramuros, el acosador tiene un sentimiento de invencibilidad, mientras que por su parte la víctima aumenta tanto su sentimiento de indefensión, como su sentimiento de soledad y miedo.

Con intención de comprender el alcance y la magnitud del impacto del cyberbullying, vamos a nombrar y describir las conductas que se encuentran dentro de esta práctica y que dado la situación actual, los adultos debemos estar muy alerta:

Provocación incendiaria: Se trata de intercambios breves de insultos y acalorados en línea.
Hostigamiento: Envío de imágenes o vídeos denigrante, mediante virus, humillación mediante juegos en línea.
Denigración: Es cuando distribuyen información despectiva y falsa de una persona.
Suplantación de la personalidad: Se trata de cuando crean perfiles falsos para denigrar, humillar.
Difamación y juego sucio: Es una práctica donde se engaña a la víctima instándola a compartir un secreto y luego se le traiciona haciendo público lo que contó de manera privada.
Exclusión social: Es cuando a la víctima se la excluye de manera consciente e intencionada.
Cybertalsting: hostigamiento que incluye amenaza de daño e intimidación.

Una vez que reconocemos lo que es el bullying y cómo se manifiesta, continuaremos describiendo las señales de alerta que como adultos debemos observar para hacer un alto y aplicar escucha activa identificando si nuestro/a hija es víctima de bullying.
En primer lugar nuestros hijos, hijas comienzan a presentar las siguientes conductas:

👣 Está apático.
👣 Tiene alteraciones en el sueño.
👣 Presenta dolores de cabeza.
👣 Se queja de dolores de estómago.
👣 No quiere ir a la escuela.
👣 Comienzan a suspender.
👣 Está irritable.
👣 Se les "olvidan las cosas".
👣 "Pierden" ropa o útiles de la escuela.

👣 Quieren estar solos y se aíslan.

👣Se excusan marcas de golpes con que son muy torpes y se "tropezaron"



Cabe aclarar que no todos los niños, niñas y adolescentes presentan el mismo comportamiento, ni todos los items descritos, pero si presentan conductas atípicas que tú cómo padre, madre podrás identificar.


Por su parte los docentes pueden observar:



👣 Absentismo.
👣 Apatía.
👣 Falta de material.
👣 Descenso de las notas académicas.
👣 Se "olvidan" las tareas a entregar, o se excusan por ejemplo diciendo que se las dejo en casa de ….

Aprendiendo con mamás en colores, te aporta una serie de indicaciones para que puedas acompañar a tu hijo, hija, alumno y ayudarlo a afrontar la situación de acoso.

Como padre, madre lo ayudas cuando:

👣 Escúchalo (puedes aplicar la técnica de la escucha activa)
👣 Hazle saber que no es su culpa, necesita saber que la situación por lo que está pasando no tiene ninguna justificación.que siempre estarás orgullosa/o de él/ella , que crees en él/ella. Y que siempre podrá contar contigo, que tú nunca estarás decepcionado de él/ella porque sabes que lo que está viviendo no es su culpa. 
👣 Habla con el tutor de su curso y mantén con él una comunicación fluida sobre cómo se abordará desde la escuela el acoso escolar, y que medidas preventivas pueden tener ante
una posible nueva situación de violencia, ya que las mismas suelen llevarse a cabo es sitios que no se ven, en cambio de clase, a la entrada y a la salida.



Como docente debes:

👣 Identificar a los espectadores pasivos y fomentar la empatía por la situación del acosado, para que lo acompañen, para que digan basta, para que avisen a los adultos cuando está produciéndose una situación de acoso.

👣 Establecer como cotidiano, los espacios de habla y escucha activa. La observación permite identificar la situación, pero el habla y la escucha permite construir lazos de confianza que harán que ante una situación de acoso, acudan a ti.

👣 Fomentar con los espectadores pasivos el trabajo colaborativo, la unión de grupo.

Implementa un programa de actuación siguiendo los protocolos establecidos. 


Hasta ahora hablamos de los diferentes actores participativos, sean tanto activos como pasivos y describimos los diferentes tipos de escenarios donde se pueda llegar a producir ésta práctica de acoso escolar. también hemos aportado una seria de sugerencias y/o indicaciones para poder detectar su presencia y actuar si fuera necesario. A continuación avanzaremos en la temática, planteando aportes desde las neurociencias implicadas en el aprendizaje y la neuropsicología. Estas disciplinas, que abordan las situaciones del aprender, así como también las de NO aprender, incluyendo el estudio y comprensión de las conductas que se suscitan en las situaciones de aprendizaje desde una perspectiva más biologisista, nos permiten empezar a plantear una posible línea de Intervención desde un momento, muy anterior a una situación de acoso escolar, es decir desde un planteo preventivo.
Para explicar este plateo, primero diremos unas líneas en relación a como la neurociencia explica el proceso de aprendizaje, para así luego plantear esta posible modalidad de intervención preventiva de situaciones de violencia la cual, como ya dijimos, es la calificación que recibe una situación de acoso escolar.
La Neurociencia implicada en lo que denominamos neuroaprendizaje determina que aprendemos, principalmente, por que estamos motivados, hay autores que citan que esa motivación incita a rellenar con explicación una necesidad, que surge a partir de la curiosidad, y ésta en su máxima expresión, no es otra cosa que la exploración. En este contexto, la curiosidad se presenta como el motivo básico de búsqueda de novedad.
Ahora bien, desde la neuropsicología se presentan las bases neurobiológicas que nos explican este proceso describiendo que, en una situación de aprendizaje se liberan neurotransmisores como por ejemplo la dopamina, quienes se encargan de regular la conducta motora, la emotividad, la afectividad, todos, estados internos importantes y necesarios para que una situación de aprendizaje tenga lugar. De esta manera se vincula el aprender con el placer, la memoria y por correlato con el conjunto de funciones ejecutivas. Desde Aprendiendo con mamás en colores traemos este aporte de las neurociencias en el que se explica que, aquello que conocemos como curiosidad, genera en nuestro interior la liberación de dopaminas motivándonos al aprendizaje. Así, la curiosidad, que se presenta
por un periodo muy corto y que solo es resuelta por la exploración e indagación, también permite desarrollar en los niños un espíritu de colaboración con sus pares en objetivos que buscan un fin común, desarrollando un sentimiento de reconocimiento del otro, permitiendo la estructuración y desarrollo de la empatía desde un trabajo colaborativo. Mirado y motivado desde afuera, desde el entorno adulto,a partir de edades muy tempranas propiciaría un reconocimiento del valor de los otros por lo tanto estaríamos aportando el valor de la empatía, siendo esta la base en todos los programas que se ponen en marcha como protocolo de acción ante una situación de acoso escolar.

Recapitulando, la breve introducción al proceso de aprendizaje a partir de las neurociencias, la importancia de la presencia e incentivo de la curiosidad en el proceso de aprendizaje y los beneficios de ésta en el desarrollo y estructuración de la empatía, nos lleva a establecer la afirmación de que si en el contexto educativo se permite y favorece la presencia y explosión de la curiosidad, la empatía fluirá de manera natural en los grupos de pares.

Desde Aprendiendo con mamás en colores somos conscientes de que en las instituciones educativas la curiosidad, como tal, No encuentra su espacio, ya sea por falta de conocimiento de su importacia, ya sea por falta de estrategias para su implementación o por que la carga currricular imposibilita su presencia en las aulas. Debido a esto, es que se observa que el afán motivado y común por descubrir de cada niño o niña, en el cual se considera que se gestarían alianzas con el objetivo de fortalecer la empatía que a su vez, evitarían situaciones conflictivas que devengan en violencia ( acoso escolar), es una oportunidad de aprendizaje , que más que a contenido académico, refiere a un contenido de formación para la vida. Por ende, la oportunidad de aprendizaje que nos otorga la curiosidad por uno u otro motivo, en la actualidad, no se tiene en cuenta como un elemento primordial para la educación de niños, niñas y adolescentes.Entender esto invita a replantear el sistema educativo en su práctica, que además de la transmisión del saber, debiera establecer las condiciones que posibiliten el desarrollo de otras habilidades como el de la colaboración, la empatía, siendo en resumidas cuentas parte vital de la formación integral del ser humano. 
Desde este articulo, realizamos una breve introducción a lo que nos convoca, por un lado conocer lo que es el acoso escolar y por otro lado establecer estrategias de intervención, no solo para atender, sino mas bien para prevenir que estas situaciones de violencia acontezcan en el escenario escolar y en el escenario de la vida diaria de nuestros hijos e hijos.

Aprendiendo con mamás en colores invita a cuestionarnos sobre la posibilidad de incorporar al sistema educativo el sustrato neuropsicobiológico de la curiosidad, con la finalidad de, por un lado reconocerla como base motivadora de los procesos aprendizajes contemplados en el currículum, y por otro lado, como origen de ese desarrollo de habilidades relacionales e interpersonales que se producen cuando por curiosidad se está explorando y en esa exploración se buscan alianzas para un bien común, que no es otra cosa que aquello que se pretende comprender y así aprender. Esta estrategia de intervención que fundamentamos la podrás encontrar mas desarrollada en otro de nuestros artículos.

De una forma sintética Aprendiendo con mamás en colores ha querido acercar a las familias y los profesionales de la educación la importancia del aprendizaje de las características y desarrollo del acoso escolar, partir de estas básicas nociones queremos que reconozcan el valor de la atención, acompañamiento y la empatía sobre nuestros niños/as y adolescente. Por ello, también te dajamos aquí, desde lectulazos, sugerencias de lecturas que puedes usar para trabajar la empatía con tus hijos/as o estudiantes. Queremos que desde casa se resignifique la comunicación entendiendo que forman parte de las bases fundamentales para propiciar un mejor afianzamiento de los conocimientos formales que luego, la escuela estructura y formaliza, permitiendo una formación completa y consciente de que el trabajo en conjunto casa-escuela hace de nuestros hijos/as personas más preparadas y mejores formadas.

Ivana y Julieta desde 

Aprendiendo con mamás en colores


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